El contratenor francés Philippe Jaroussky y la beluga Yalko, han interactuado “interpretando” una melodía, en el Oceanográfic de Valencia.
La beluga es uno de los cetáceos que emite más cantidad y variedad de sonidos. Son conocidas como los «canarios del mar» por su complejo repertorio de gorjeos que pueden ser oídos dentro y fuera del agua. Las belugas pueden llegar a emitir hasta 32 sonidos, algunos muy parecidos a los que emite el ser humano.
Antes de iniciar el «diálogo musical», el contratenor tuvo un primer contacto con la beluga a través del cristal y, posteriormente, subido a una plataforma sobre el agua y arrodillado, ha comenzado a interactuar con ella, primero emitiendo algunas escales musicales y después interpretando diversas arias barrocas.
Jaroussky, aceptó este reto tras ser animado por la soprano Cecilia Bartoli, quien durante una visita privada al complejo valenciano tuvo contacto directo con las belugas y descubrió que estos cetáceos realizaban distintos sonidos según las partes de su cuerpo en los que eran acariciados.
Esta beluga es un espécimen muy especial, ya que frente a los cinco o seis sonidos que emiten otros ejemplares de su especie, ella emite unos 25.
Jaroussky, ha llevado a cabo este reto coincidiendo con nueva gira por España.