Recientemente, la familia del violinista polaco Roman Totenberg ha podido recuperar un Stradivarius que fue robado al músico en 1980.
El Ames Stradivarius, hecho a mano en Italia en 1734 por Antonio Stradivari y uno de los pocos que quedan, fue robado hace 35 años después de un concierto que ofreció Totenberg en la Escuela de Música Longy en Cambridge (Massachussetts).
El violinista, que compró el Stradivarius en 1943, lo dejó en un despacho de la Escuela de Música para saludar a sus admiradores tras un concierto y al regresar, ya había desaparecido.
El violín, de un valor incalculable que en el siglo XIX perteneció a George Ames y de ahí su nombre, fue recuperado hace unos días en un hotel en Manhattan, después de que una mujer, que lo heredó de su esposo, lo llevase a un experto para ser valorado.
Al reconocer que se trataba del instrumento robado, la mujer lo notificó a las autoridades y, al ser contactada por los agentes del FBI, entregó voluntariamente el violín.
El propietario, ya fallecido, emigró a Estados Unidos en 1938 y murió en 2012 a los 101 años, tocando con las orquestas más importantes del mundo.
Precisamente, hace poco más de un año, también se pudo recuperar otro violín Stradivarius que había sido robado.